26/01: The Sandman
– Vol. 1: Sueño (496 Págs.)
Neil
Gaiman, Sam Kieth y Mike Dringenberg – Planeta DeAgostini 2010
Los orígenes del sello Vértigo
se cimentaron sobre una de las series más premiadas (Hugo o Eisner, por citar algunos) y
fascinantes que se hayan publicado jamás, y que tiene el mérito de haber sido
publicada en 5 ediciones diferentes al español. En este caso, es la edición en
7 volúmenes (casi como masacotes de 500 páginas) que Planeta DeAgostini publicó hace pocos años, y puede encontrarse en
comiquerías del país. The Sandman es
una hábil mezcla de relato onírico, cómic de terror de los 60 y literatura en
estado puro no deja indiferente a nadie que haya paseado por sus páginas.
Toda la culpa la tiene Neil Gaiman,
que allá por los 80 recibió el encargo de crear una colección dirigida a
lectores adultos, e inspirada en algún personaje poco conocido. El británico
escogió a Sandman, un antihéroe creado en los setenta por Joe Simon
y Jack
Kirby. En DC aceptaron la
propuesta con la única condición de que todo lo que sabíamos del antiguo Sandman quedara olvidado. Todo tenía que
empezar de cero. Gaiman creó entonces
a Morfeo,
Rey de los Sueños, atrapado por
error por un culto que buscaba aprisionar a la Muerte
misma. De esta manera, comienza una de las obras maestras del cómic actual. Nos
encontramos ante una de las colecciones de lectura inexcusable, con tantos
matices que anima al lector a volver una y otra vez a ella. La historia
comienza en 1916. En el mundo ocurre un extraño fenómeno: la gente se va a
dormir, y no es capaz de despertar. En Whych Cross, Inglaterra, un mago intenta
raptar a la Muerte, pero su errado
hechizo apresa a otra criatura mágica. Sueño,
el hermano de Muerte, ha sido
capturado, y el mundo de los sueños ha quedado huérfano. Ahora nadie puede
dormir bien, si no es capaz de soñar.
En este primer volumen podemos disfrutar
de los primeros 16 números de la colección regular The Sandman, compuesta por las sagas Preludios y
Nocturnos y La Casa de Muñecas. En la primera de ellas asistimos a la
liberación tras años de cautiverio de Morfeo
y a la búsqueda de los objetos que le fueron robados. Personajes como Etrigan,
John
Constantine o Muerte desfilan con acierto y
lucidez por las páginas de la colección en estos primeros números.
En
la segunda saga, cuando Morfeo vuelve
al Reino del Sueño, se encontrará con algunas novedades desagradables: varias
de las criaturas que poblaban sus dominios han aprovechado su ausencia para
trasladar su residencia al reino de los humanos. Entre ellos hay seres tan poco
recomendables como Bruto y Glob, entidades benevolentes como “El Campo del Violín” y auténticos
monstruos como “El Corinto”. Morfeo ha de encontrarlos y devolverlos
a su lugar, pero hay algo aun más perentorio. Durante su ausencia se ha
originado un “Vórtice” en el mundo de la vigilia, una especie de imán que atrae
los sueños de todos los soñadores a su alcance hasta que llega a asimilarlos
todos, momento en que colapsa ocasionando la desaparición de todos los sueños y
el mismo fin del mundo en el que se ha originado. Morfeo debe de destruirlo si no quiere que se produzca una tragedia
de dimensiones inconmensurables. Afortunadamente el “Vórtice” se ha encarnado
en Rose Walker, una jovencita cuya
desaparición no parece plantear demasiados problemas.
Qué mas agregar para esta serie que tantas
buenas críticas cosechó, instalándose en el altar de clásico y obras
contundentes en el Noveno Arte. Sólo decir que me ha dejado completamente
cebado, y aunque cuesten muy caro estos volúmenes en las comiquerías, ya me
hago con todos para seguir leyendo, y arrepentirme de no leer este cómic antes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario