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Detective Conan – Vol. 1 - Tomo 9 (180 Págs.)
Gosho Aoyama – Planeta
DeAgostini 2004
Continúo
firmo leyendo el Volumen 1 de Detective Conan, que son los primeros 13
tomos de este manga escrito y dibujado por el autor Gosho
Aoyama. En reseñas anteriores, expliqué el motivo de que la editorial
española Planeta DeAgostini publicara
la serie con esta extraña división de Volumen
1 y Volumen 2. Y como compré por
la famosa página de compra y venta estos primeros 13 tomos que componen el Volumen 1, estoy en la tarea de terminarlos
antes de fin de año. Este noveno tomo recopila los capítulos 81 a 90, y así
como el anterior, es muy entretenido y los casos se ponen muy interesantes.
Aunque no se avance mucho con la historia central (el protagonista encogido por
los Hombres de Negro) y los casos
puedan parecer repetitivos, la inventiva de Gosho
Aoyama para crear casos y situaciones intrigantes es realmente asombrosa.
Este tomo comienza con una aventura (de 3
capítulos) de los incansables Detectives
Juveniles. En esta ocasión se encuentran jugando al escondite en un parque,
cuando Ayumi se esconde en un
lugar “poco apropiado” y desaparece. Los niños se ponen a buscarla, y
gracias a la chapa walkie-talkie que les dio el Profesor Agase logran comunicarse con ella. El problema es que ya
se encuentra muy lejos del parque y junto a unos peligrosos hombres. ¿Lograrán
encontrarla a tiempo? Es en esta historia cuando además, Ayumi muestra sus sentimientos y deja ver quién es su primer amor. El
final anticlimático deja mucho que desear, pero parece que Aoyama no sabía como terminar este caso de secuestro.
El siguiente misterio tiene lugar cuando Kogoro
se reúne con sus antiguos amigos de
la universidad. Conan y Ran también lo acompañan. Se encuentran
pasando una agradable estancia en un balneario cuando una de las amigas es
asesinada. Está claro que el asesino es otro componente del grupo. Kogoro quiere resolver a toda cosa el
misterio, está muy dolido de pensar que algo así ha podido sucederles. Conan comprende que, aunque sea él mismo
el que descubra el misterio, no debe interferir en esta ocasión durmiendo a Kogoro. Una historia atípica con lo
que venía leyendo, teniendo Kogoro un
papel principal. Una lástima que dure apenas tres capítulos.
El último misterio (de 4 capítulos y que queda
la definición en el próximo tomo) tiene lugar en una mansión donde la hija de un empresario celebra su cumpleaños. Kogoro, Conan y Ran han sido
invitados. Durante la ceremonia podemos ver como la joven cumpleañera bromea
con varios de los invitados (supuestamente los 3 quieren casarse con ella, y
ella debería elegir a uno). No es que los trate de muy buenas formas, y la cosa
se complica cuando se quedan incomunicados en la mansión. Alguien ataca a Ran y posteriormente otra persona
aparece asesinada. ¿Qué está ocurriendo? Conan
tendrá que darse prisa para poder salir pronto de ahí y evitar que algo le
vuelva a suceder a Ran. Un misterio
que empieza medio flojo, pero que a medida que pasan los capítulos se pone
pesado y muy intrigante.
Y
con un final donde Conan descubre
quién es el asesino, pero no se dice quién es y te dejan con la duda para el
próximo capítulo que estará en el décimo tomo, los lectores no aguantarán mucho
para leer el décimo tomo de este genial manga.
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