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Argentina Comic-Con
Año 2013 y 2014
Las
ferias, festivales, convenciones y demás espacios de encuentro del ambiente del
cómic en todos sus estratos (editores, autores y lectores) son vitales para su
mantenimiento y crecimiento cuantitativo y cualitativo. Intento ir a los
eventos más masivos y con propuesta más variada, es por eso que el año pasado y
este año también estuve en la Argentina Comic-Con. Toca ahora
realizar un comentario luego de haber asistido.
Tal
como se preveía, se trató de un evento dedicado a la cultura pop en
general y no al cómic en sí mismo, de manera similar a lo que es la San Diego Comic-Con, aunque en el caso
de esta se trata de una convención de cómics (de ahí su nombre) que devino con
el tiempo, y los deseos de crecimiento, en el punto de reunión para la
industria de la cultura pop en toda su extensión. Los organizadores de
la Argentina Comic-Con eligieron ese nombre para atraer la
atención y que sea relacionado por el público con aquella de los Estados
Unidos, procurando imitar ese modelo estadounidense. Para ello, se crearon
diferentes espacios en el área del evento dedicados a cine y televisión,
videojuegos, historietas y más, con grandes nombres de empresas promocionando
sus próximos productos.
Por
el planteo del evento como una convención a la norteamericana, por esas marcas,
por los nombres de los invitados (Emily Kinney, Ciruelo y Liniers,
como sobresalientes el año pasado), por las muestras, por la cobertura
mediática, por la invitación a participar en concursos de cosplay o por un poco
de todo esto, se atrajo a gran cantidad de público que pudo disfrutar lo que
interesaba a cada uno (a pesar del calor sofocante, uno de los lamentados
protagonistas de la convención que no fue del todo previsto de parte de la
organización el año pasado).
En
cuanto al perfil del evento, el contenido del cronograma de charlas y demás
actividades no fue demasiado trabajado, desaprovechándose la presencia de
tantos invitados, en particular de los muchos artistas de cómics que no
tuvieron suficiente espacio y fueron ubicados en los márgenes del evento. Esto
deja en claro que en efecto no se trataba de una reunión dedicada a los cómics.
No obstante, sí gozaron de un sitio central (literalmente en el centro del
lugar) los stands de diferentes tiendas de historietas y otros
artículos afines, con especial foco de atracción en la editorial que publica Marvel, Hellboy
y The Walking Dead en la Argentina, Ovni Press.
Por lo tanto, se trató de un evento que resultó de un perfil más comercial, lo
cual desde luego también sirve al mercado de la historieta y revalida el
interés en el género (y afines).
Para
la próxima edición que seguramente se realizará, esperaría un mayor balance entre lo comercial y lo artístico (por
decirlo de alguna manera), otorgando mayor protagonismo a los invitados, en
cuanto a espacios y en el cronograma, y una mayor organización de este último
en general. Veremos hacia dónde se orienta en el 2015 la organización de este
evento que cuenta con la materia prima para desarrollar una muy buena cita.
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