20/03: The Walking Dead Vol. 8: Hechos Para Sufrir (144 Págs.)
Robert Kirkman y Charlie
Adlard – Ovni Press 2013
Llegamos a la saga suprema de este cómic.
En el que pasa de todo: muertes, escapes, balaceras, sorpresas, más muerte,
suspenso, más muertes, etc. Esta saga corresponderá a la esperada batalla entre
la gente del pueblo del Woodbury
guiados por el Gobernador, contra
los sobrevivientes que defienden la prisión, y cerrará toda la historia creada
alrededor de dicha prisión. Para que cause un gran impacto, y hacer una especie
de cierre a las sagas anteriores, tenemos muertes de personajes a rolete, y un
cierre al personaje del Gobernador
como antagonista principal.
Como siempre, nos llega de la mano de Ovni
Press, con la traducción de Mauro Mantella.
Esta saga, publicada en el país en el 2013, corresponde a los números
USA 43 a 48. El guión a cargo del maestro Robert
Kirkman, y cuenta como siempre con el dibujo de Charlie
Adlard y los grises de Cliff Rathburn.
Como siempre, los guiones nos sorprenden con giros y giros en las decisiones de
los personajes, pero que no nos resultan forzadas, si no entendibles. Y llegan
a un espectacular clímax, aunque tal vez hubiera resultado mucho más jugoso
tener escenas de más acción, y de un enfrentamiento a gran escala.
La
saga empieza explicándonos cómo sobrevive el Gobernador a las torturadas a las que fue sometido por Michonne, y cómo encuentra la prisión y
convence a Woodbury para atacarla,
con un buen discurso de dictador. Inmediatamente tenemos el asalto a la
prisión, con tiros a rolete y tensión a más no poder, ya temiendo que van a
achurar a un par de personajes. Luego de este asalto fallido, tenemos un
pequeño respiro, un pequeño momento de paz. Pero al producirse la fuga de un
par de personajes, tenemos una difícil situación para seguir defendiendo la
prisión. Y cuando esto sucede, tenemos muchas muertes de los sobrevivientes
(que se reducen a la mitad), y una muy buena escena final cuando Rick, Carl y Lori intentan
fugarse, que te llene de adrenalina, y te hace querer gritar: ¡Corran!
¡Corran!.
Se terminaron las historias en la prisión, y la saga termina con un
montón de incógnitas sobre el bienestar y ubicación de los sobrevivientes, que
te hace querer ya mismo los próximos tomos, y saber qué irán a hacer a
continuación. Un digno final, para tanta historia que habían preparado para esta batalla. Sólo
resta preguntarse ¿quién se pondrá en los zapatos del Gobernador y ocupará semejante puesto de antagonista tan bien
logrado?
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