Mostrando entradas con la etiqueta Rafael Albuquerque. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Rafael Albuquerque. Mostrar todas las entradas

viernes, 17 de junio de 2016

17/06: American Vampire Vol. 4



17/06: American Vampire Vol. 4 (160 Págs.)
Scott Snyder, Jordi Bernet y Rafael Albuquerque – ECC Ediciones 2014

American Vampire es un vehículo maravilloso para que Scott Snyder pueda explorar su fascinación evidente con la historia social de los Estados Unidos. Esta vez, le toca el turno al cuarto tomo de esta serie, que tiene en su haber los números 19 al 25 de la serie regular, entre los que se encuentran dos arcos argumentales: “La Bestia de la Cueva” y “Carrera Mortal”.
En el primero de dichos arcos, conoceremos la faceta infantil de Skinner Sweet y el joven James Book. En esta historia, veremos a los dos protagonistas siendo ya adultos, convertidos en soldados del ejército de infantería de Estados Unidos, los cuales se encuentran junto a su destacamento en busca y captura de un jefe indio y sus hombres. Pero un mal conocido por el nombre de Mimiteh resurgirá a manos de los guerreros indios para intentar equilibrar la balanza de la guerra.

  La trama de este primer arco nos ayuda a conocer más de cerca las motivaciones innatas de Skinner y su relación con Book, haciendo que los sucesos mostrados en los primeros cómics adquieran una mayor trascendencia emocional al conocer la afiliación de sus dos protagonistas. Lo malo de este primer relato, es que ha sido dibujado por el barcelonés Jordi Bernet y lamentablemente, no sigue el estilo oscuro y tétrico al que Albuquerque nos tenía acostumbrado; y aunque el dibujo cumple correctamente, los vampiros que observamos en la parte final de la historia no dan miedo ni nada parecido.
 Por otro lado, el segundo arco argumental, “Carrera Mortal”, es simplemente sensacional. Situándonos a mediados de los años 50, nos presentan a un nuevo personaje, el joven rockabilly Travis, quien será capaz de poner en jaque la vida de los chupasangres. La historia se irá desmenuzando de forma atemporal, ya que iremos dando continuos saltos en el tiempo para ir conociendo las respuestas a las preguntas que nos van surgiendo. Y Scott Snyder bien sabe hacer, algunas de estas explicaciones serán dadas en los momentos más estresantes. Eso sí, esta vez el gran Rafael Albuquerque vuelve a estar a cargo de los lápices; por lo que además de estar ante una muy buena historia, el dibujo le acompaña de manera magistral.
 Esta saga, que continúa sorprendiendo gratamente a quien la lee, intenta romper las barreras culturales de los cómics, logrando así llegar a un público adulto que disfruta con un más que buen relato. La edición a cargo de ECC Ediciones está muy completa, con introducción y portadas originales. Si tienen algún dealer que les traiga esta serie por importación, no duden en hacerse con ella.

jueves, 14 de abril de 2016

14/04: American Vampire Vol. 3



14/04: American Vampire Vol. 3 (160 Págs.)
Scott Snyder, Danijel Zezelj y Rafael Albuquerque – ECC Ediciones 2013


 
Esta serie es un verdadero disfrute. El primer volumen llamó la atención sobre todo porque estaba metido el mismísimo Stephen King. De Scott Snyder nadie había oído hablar en ese momento. Y la serie estaba bien. El segundo volumen ya solo estaba Snyder y mantenía la calidad. Pero este volumen es impresionante, insuperable. Snyder consigue convertir un género tan manido como el de los vampiros en algo completamente novedoso y sorprendente. Publicado al español por ECC Ediciones, este tercer volumen (que recopila los números American Vampire #12 a 18) puede conseguirse en algunos dealers virtuales o comiquerías.

La saga principal llamada Guerra Fantasma es por el momento la mejor historia de la serie, repleta de acción, emoción y ganas de más. Rafael Albuquerque cada día hace un mejor trabajo y es un verdadero placer disfrutar de su arte, uno de los mejores trabajos que se pueden encontrar en la actualidad.
La primera historia, que lleva por nombre “Frontera Extranjera”, volverá a centrarse en el personaje más carismático de esta saga, el vampiro americano conocido por el nombre de Skinner Sweet. En ella, nos remontan a 1919, donde veremos como el chupasangre acude a ver un espectáculo donde reviven el viejo oeste, con tan mal infortunio, que verá cómo su nombre es mancillado de manera pública para el deleite de los allí presentes.
 Luego dará comienzo la saga de seis números conocida como “La Guerra Fantasma”, en donde veremos cómo un Henry desquiciado por el mundo en general y por su propia situación, anhela sentirse vivo y para ello busca irremediablemente inmiscuirse en problemas, hasta que el agente Hobbes, miembro de la organización de cazadores de vampiros conocida como “Los Vasallos de la Estrella Matutina”, da con él. Este le ofrecerá un trato para sentirse vivo, viajar junto a un comando de fuerzas especiales (dentro del contexto de la Segunda Guerra Mundial) a una remota isla de Japón, donde se cree que existe un nido de vampiros. Lo que en principio parecía una misión sencilla, se tornará en un auténtico infierno, sobre todo cuando encuentren a una nueva raza de chupasangres. Desde ese momento, dará comienzo una acción frenética, algo que se ha convertido ya en una característica de esta serie, donde seremos testigos de situaciones llevadas a cabo por actos de desesperación. Y por si fuera poco, un viejo conocido de Pearl volverá a aparecer, teniendo un papel totalmente determinante en el destino del comando allí presente.
 Un cómic que al igual que pasa con sus predecesores, la calidad argumental no decae en ningún momento, teniendo un clímax final en el que seremos incapaces de apartar nuestros ojos de las páginas hasta que hayamos concluido el relato.

martes, 16 de febrero de 2016

16/02: American Vampire Vol. 2



16/02: American Vampire Vol. 2 (144 Págs.)
Scott Snyder, Mateus Santolouco y Rafael Albuquerque – ECC Ediciones 2013

Hoy sigo con vampiros, pero dejamos el romance. En el primer volumen de la cabecera, vimos que, mientras Stephen King nos contaba el origen de Skinner Sweet como el primer vampiro americano, Scott Snyder hacía lo propio con Pearl Jones en el Hollywood de los años 20. Después de esta necesaria introducción, en la que se nos presentaba la trama presente en toda la colección, a saber, el relato de la historia norteamericana -y, en menor medida, europea- a través del conflicto de viejos vampiros europeos y nuevos vampiros americanos, es hora de afrontar una nueva etapa en la serie, en este segundo volumen publicado en España por ECC, recopilando los números American Vampire #6 al #11.

 Concretamente, Scott Snyder, esta vez sí como único guionista, nos traslada a Las Vegas de 1936. Contextualizando un poco la situación, mencionar que Estados Unidos estaba viviendo la crisis económica más importante del siglo pasado. Para luchar contra ella, se optó por aplicar el New Deal, que consistió estimular la economía a través del gasto público mediante la construcción de varias infraestructuras. El primer arco del volumen, El Diablo de las Arenas, nos pondrá en la piel del sheriff o jefe de policía de la Ciudad del Pecado, Cashey McCogan. A raíz de la construcción de la presa, la ciudad ha visto aumentada notablemente su población, sin que ello haya significado un incremento de las fuerzas del orden. Así pues, en medio de un clima de gran tensión como este, alguien o algo empezará a asesinar a los dueños de las cuatro empresas constructoras de la presa de la ciudad, grupo conocido como el Consorcio. Tras unas breves investigaciones, “Cash” y el recién llegado agente del FBI, Straw, junto a su ayudante, la señorita Book, descubren que el crimen está relacionado con un conocido burdel de la zona; lugar en el que, además, asesinaron al padre de Cashey apenas dos meses atrás, y cuyo dueño es el principal sospechoso del homicidio.
 Este arco nos muestra la vida de Pearl y Henry diez años después de lo acontecido en el primer volumen. Vida que será muy importante en el siguiente arco argumental, de tan sólo dos números, dedicado a la feliz pareja y sus desventuras en su nuevo hogar y, más concretamente, en un concierto. Por otro lado, volveremos a ver a alguien que no esperábamos, alguien con muchas ansias de venganza sobre Pearl y que promete hacerle la vida muy difícil a esta última.
 Si el primer tomo me parecía demasiado introductorio para hacerme una idea del potencial de la colección, no podía estar más en lo cierto, puesto que este volumen es bastante mejor. El guionista intercala a los personajes magistralmente y sabe cómo caracterizarlos, por lo que ningún personaje sobra y todos ejercen su papel a la perfección. Además, a lo largo del tomo, Snyder nos va dejando pistas acerca de las enormes posibilidades que tiene el mundo que ha construido. Del dibujo, poco que decir: Rafael Albuquerque tiene un estilo muy personal, muy acorde con la temática vampiresca del volumen, sabiendo reflejar muy bien las más horrendas criaturas y los sentimientos de los personajes. Mateus Santolouco cumple con su función y nos ofrece un estilo similar al del brasileño.
 En definitiva, este volumen nos muestra el verdadero potencial de la cabecera: un mundo muy rico donde los vampiros no son lo esencial, sino las relaciones entre ellos y la sociedad norteamericana. Personalmente, lo considero un imprescindible para todos aquellos que piensan que no se puede hacer nada más con los vampiros.

sábado, 17 de octubre de 2015

17/10: American Vampire Vol. 1



17/10: American Vampire Vol. 1 (200 Págs.)
Scott Snyder, Rafael Albuquerque y Stephen King – ECC Ediciones 2013

Pasé por los zombies, los demonios y los monstruos, y en el mes del terror en el blog faltaban las historietas de vampiros. Hace poco tiempo me hice a través de Amazon, con algunos tomos de esta serie que ECC fue publicando a partir del 2013, y que estaré completando en los siguientes meses. American Vampire es un cómic que aparece justo en la cresta de la ola de este revival vampírico que disfrutamos o sufrimos (según la óptica) en los últimos años. Sus autores insisten en presentar su trabajo como una reacción a la desnaturalización que está sufriendo la figura del vampiro, como un retorno a la concepción de éste como depredador chupasangre sin más adorno ni fanfarria. La obra cuenta con guión de Scott Snyder, del que pude leer su obra más reciente en Vertigo en el primer día de este mes, pero también cuenta con el atractivo añadido de ser la primera incursión en el mundo del cómic de Stephen King, un auténtico “prócer” de la literatura moderna.

 La historia concebida por Scott Snyder, y posteriormente guionizado por él y Stephen King, cuenta dos historias con un nexo de unión: el personaje de Skinner Sweet, el primer vampiro americano, pionero de una nueva especie más poderosa, capaz de caminar bajo el sol. Así, el cómic alterna la historia del nacimiento de este vampiro en el “wild west” norteamericano de finales del siglo XIX, guionizada por Stephen King, con el relato de Pearl Jones, una joven aspirante a actriz en el Hollywood de la década de los 20 (trama guionizada por Scott Snyder).
 Como principal pecado del cómic habría que señalar que la historia de Pearl Jones, por original e impredecible, resulta mucho más interesante que la de Skinner Sweet, lo que descompensa la lectura y hace que las páginas ambientadas en el salvaje oeste se conviertan en un trámite. Quizás porque el “vampiro genuino” que venía a romper con los moldes del chupasangre moderno resulta ser un personaje mucho más plano y evidente que el de la joven actriz, quizás porque a Stephen King se le nota en exceso que no domina el medio, y su narración resulta correcta, pero carente de ritmo y con diálogos extrañamente articulados. Lo cierto es que American Vampire sería mejor cómic si se centrara en la historia de Pearl Jones y relegara a Skinner Sweet al papel de secundario curioso cuya historia se narra en esporádicos flasbacks. Sin embargo, hay una obstinación por parte de todos en que éste sea el protagonista y en hacernos ver que el personaje es todo un hallazgo (supongo que por eso su historia se ha puesto en las manos de King), cuando lo cierto es que carece de la complejidad y misterio que debería tener un protagonista. Quizás, que los vampiros sean caballeros atormentados por la naturaleza de la bestia, hombres que intentan no deshumanizarse (en lugar de dar rienda suelta a su salvajismo), no sea, al fin y al cabo, tan mala idea.
 Un cómic interesante que merece una lectura, bien ilustrado por Rafael Albuquerque, que tiene el acierto de variar el color con el que acompaña a su lápiz según dibuje las páginas correspondientes a Skinner Sweet o a Pearl Jones, pero no es un cómic memorable que vaya a revolucionar la figura del vampiro moderno. Aún así, es muy entretenido ver esta nueva forma de presentar a los vampiros, y es muy recomendable a los amantes del género.