viernes, 10 de julio de 2015

10/07: Asterix Vol. 4: Gladiador



10/07: Asterix Vol. 4: Gladiador (48 Págs.)
René Goscinny y Albert Uderzo – Grupo Planeta 2015

Asterix Gladiador es el cuarto volumen de las historietas de Asterix, creado por René Goscinny en los guiones, y Albert Uderzo en los dibujos, publicado originalmente en álbum europeo en 1964. Las aventuras de Asterix y Obelix no están sólo enfocadas para los más jóvenes, sino que tras su apariencia de cómic infantil o juvenil, se esconde una obra más compleja, con más capas que la exterior. Los niños disfrutan con las aventuras de una pareja de amigos que se meten en un montón de líos. Los adultos, en cambio, se deleitarán con el fino humor de los guiones, repleto de geniales juegos de palabras y referencias al mundo clásico (muchas de ellas irónicas), así como referencias al mundo real, como la carrera de carros, que recuerda la premiada película Ben Hur.

 En Gladiador, el centurión quiere regalarle al César un galo de los invencibles para que sea esclavo. Linus dice que eso es imposible pero el centurión sigue empeñado. Mientras, en la aldea gala, Asuranceturix sale al bosque a cantar pero los romanos le tienden una trampa y le raptan. Abraracurcix, el jefe de los galos envía a Asterix y Obelix en la misión de ir a rescatarle. Al llegar a Roma, van a un restaurante donde conocen a Jabálix, quien les oye hablar de rescatar a un galo esclavo y les hace entrar en el coliseo romano para rescatar a su compañero, y sólo se puede entrar al coliseo siendo un gladiador, por lo cual los héroes galos se hacen pasar por gladiadores. A la mañana siguiente piden que si pueden ser gladiadores. En el día de los juegos empiezan las aventuras más divertidas, con las carreras de carros que ganan Asterix y Obelix, luego luchan contra los leones y finalmente contra otros gladiadores. El Cesar les deja pedir lo que quieran, y los galos piden que dejen libre a Asuranceturix y a todos los gladiadores.
 Es un álbum muy divertido, en gran parte por el singular humor que surge de los guiones de Goscinny, pero no por ello hay que desmerecer el trabajo de Uderzo. Sus dibujos van ganando en riqueza y expresividad a medida que el diseño de los personajes evoluciona y no cabe duda de que sus ilustraciones son el marco perfecto para el genio de su compañero guionista; asimismo, también hay que tener en cuenta que el propio Goscinny no se queda atrás y sus guiones se van enriqueciendo con bromas internas y cargándose de ironía con la publicación de cada álbum.

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